Cuando tenemos una boda, lo normal es
centrar toda o casi toda nuestra energía en el vestido de la novia,
aunque tanto ella como el novio son los protagonistas del día, la novia,
por lo general, suele acaparar mayor protagonismo. Pero, no por ello
debemos olvidar al novio. Ellos también necesitan consejos y conocer las
novedades que en cuanto a moda hay para ellos. Por desgracia, no varía
mucho, pero sí que es cierto que tienen reglas de etiqueta.
En primer lugar os hablaré del Chaqué ya
que es el más habitual en este tipo de actos. En Albacete, por lo
general, era el atuendo preferido por los hombres para el día de su
boda, hoy en día, como en otros lugares varía según los gustos. Este
atuendo consta de tres piezas básicas; el pantalón, levita y chaleco.
El traje suele ser negro con el
pantalón de corte clásico a rayas negras y grises o traje totalmente
gris aunque la moda y tendencias hacen que estas normas queden un poco
relegadas al olvido y entren en juego las imperantes formas actuales.
A este atuendo también se le llama traje de día puesto que solo se usa en bodas de mañana y a primera hora de la tarde
y su parte más característica es la levita ya que su diseño se remonta a
la corte británica en la que los caballeros montaban sus caballos de
esta guisa y los largos faldones de la levita colgaban a ambos lados de
los lomos del animal. Su uso se fue generalizando hasta llegar a ser uno
de los elementos fundamentales en este tipo de ceremonias.
El chaleco se suele confeccionar de la
misma tela que la levita pero como comentaba anteriormente, las
tendencias están haciendo que estas normas cambien. Actualmente podemos
ver chalecos con diseños más originales, con motivos y de diferentes
telas y colores. Lo mismo le sucede a la corbata pero según la teoría,
ésta debe de ser de color gris. Y nunca se usa cinturón. Si se precisa podemos echar mano de unos buenos tirantes.
No debemos olvidar que el novio debe de ser el más elegante en su día y por ello si éste no lleva chaqué, ninguno de los invitados debe llevarlo. En el caso de que el novio sí que lleve chaqué, deben llevarlo también los familiares más allegados y por supuesto el padrino.
En segundo lugar, contamos con el Frac. Es el traje de máxima gala y lo podemos encontrar en bodas de alto postín y siempre de noche. Yo
nunca he tenido la oportunidad de verlo, ya que todavía no me han
invitado a una boda de alto postín en Albacete o a un gran evento, eso
sí, como buena amante de la moda no pierdo la esperanza. Cabe mencionar
que es el atuendo que encontramos en actos muy solemnes como en la
entrega de los Premios Nobel. Es muy raro que en una boda precisen de su
uso pero aún así debemos saber que existe esta posibilidad.
El frac consta de chaqueta negra con forro y solapas de seda, muy corta por delante y faldones muy largos. El chaleco siempre será de color blanco al igual que la pajarita. Lo podemos ver alguna vez en color negro pero sólo en funerales que lo requieran.
La camisa suele ser de seda y su
abotonadura suele ser de perlas y recordemos que no se usa cinturón. Es
un traje muy elegante que, sin lugar a dudas, no pasa desadvertido Pero
ojo, ¡los excesos no son buenos!
Por último, el Smoking. Al ser un atuendo cuyo uso se debe a la etiqueta, he de comenzar diciendo que nunca se lleva en bodas.
Su uso se remonta al siglo XIX, en los salones de fumadores ingleses
donde se requería etiqueta para la entrada. De ahí deriva el nombre del
traje.
Es un atuendo de semi-gala con el que podemos asistir a
eventos que así lo requieran. Siempre de noche. La
chaqueta es cruzada con una o dos filas de botones y las solapas y el
forro, al igual que el frac, son se seda. La chaqueta suele ser negra
pero la podemos ver blanco o beige en actos al aire libre y en
verano. Si la chaqueta es cruzada no se debe vestir fajín.
El pantalón es liso y no lleva vuelta y
la camisa suele ser de popelín o de hilo con botonadura de perlas o
cubre botones para que éstos no sean visibles. La pajarita siempre negra y
respecto al chaleco debe ser negro y de seda pero su uso solo es necesario cuando no llevamos fajín.
Espero con estas pequeñas referencias haberos aclarado un poco el uso de la etiqueta por parte de los hombres.
Como siempre, un placer.
Fransuas